La guardameta Cristina Maestra, clave en el pase a cuartos de la Recopa, confía en obtener una buena renta en el encuentro del domingo
La portera Cristina Maestro, ayer en el Pitiu Rochel tras el entrenamiento. JOSE NAVARRO |
Cristina Maestro fue uno de los principales exponentes del Mar Alicante en la eliminatoria ante el FIT Copenhagen. En el encuentro de vuelta disputado en el Pitiu Rochel se convirtió en el auténtico muro para las danesas. Sus paradas fueron determinantes. Con su actuación y la del resto de sus compañeras del Mar voltearon un duelo que les dio el pasaporte para estar en el bombo del sorteo de los cuartos de final de la Copa EHF de balonmano femenino.
El estado físico de Cristina, con molestias en la rodilla, ha provocado que su participación a estas horas esté en el aire. Con todo, habrá que aguardar hasta el mismo domingo para desvelar el concurso de la guardameta en el choque frente al Rostov de Rusia. Por ganas e ilusión no será. En todo caso, la plantilla dirigida por Ángel Sandoval dispone de argumentos como Linda Pradel o María Eugenia Sánchez para poner el candado a la portería.
Dejar en la cuneta al FIT Copenhagen ya fue toda una gesta, demostrando que el Mar Alicante es capaz de superarse a sí mismo pese a que el potencial del rival sea superior. Luego en la pista la realidad dibuja un escenario diferente y con color alicantino. La visita del Rostov -este domingo a partir de las 12.30 horas en el Pitiu- con motivo de la ida de los cuartos de final de la EHF, contiene tintes similares a la eliminatoria anterior. En este sentido, Cristina Maestro declaró que el compromiso del fin de semana "es un partido complicado y difícil, aunque no hay nada imposible".
Cristina, mermada físicamente, hará todo cuanto esté en su mano para ayudar al grupo, bien participando en el partido -si se repone a tiempo- o desde el banquillo como una aficionada infiltrada. "Tengo ilusión, lo que pasa es que estoy un poco tocada de la rodilla. De todos modos, estaré alentando a mis compañeras".
Cristina destacó que Sandoval ha desvelado que el adversario dispone de "buenas lanzadoras exteriores y sus extremos hacen daño". Por ello, apeló a un alto "nivel de concentración" para atajar los disparos. Además, añadió que "en Europa se nota mucho el nivel superior de las jugadoras y los lanzamientos son diferentes, puesto que el balonmano es otro más rápido y dinámico".
En cuanto al objetivo, como no podía ser de otra forma, la portera del Mar Alicante incidió en dar un paso al frente para que el escenario sea más ambicioso. "El reto es estar entre las cuatro mejores y una vez que eso se haya conseguido entonces habrá que pensar en superar al siguiente para llegar a la final. No puedes perdonar"
Una de las claves para no caer ante el Rostov pasa por obtener un resultado contundente en Alicante. Para Cristina Maestro ese margen de maniobra quedaría perfecto obteniendo "una renta de siete goles de diferencia. Allí nos espera un pabellón lleno y con mucha presión" Por este motivo, realizó un llamamiento a los aficionados. "Si el Pitiu Rochel presenta idéntico aspecto que el día que superamos a las danesas, seguro que habremos recorrido gran parte del camino".
El estado físico de Cristina, con molestias en la rodilla, ha provocado que su participación a estas horas esté en el aire. Con todo, habrá que aguardar hasta el mismo domingo para desvelar el concurso de la guardameta en el choque frente al Rostov de Rusia. Por ganas e ilusión no será. En todo caso, la plantilla dirigida por Ángel Sandoval dispone de argumentos como Linda Pradel o María Eugenia Sánchez para poner el candado a la portería.
Dejar en la cuneta al FIT Copenhagen ya fue toda una gesta, demostrando que el Mar Alicante es capaz de superarse a sí mismo pese a que el potencial del rival sea superior. Luego en la pista la realidad dibuja un escenario diferente y con color alicantino. La visita del Rostov -este domingo a partir de las 12.30 horas en el Pitiu- con motivo de la ida de los cuartos de final de la EHF, contiene tintes similares a la eliminatoria anterior. En este sentido, Cristina Maestro declaró que el compromiso del fin de semana "es un partido complicado y difícil, aunque no hay nada imposible".
Cristina, mermada físicamente, hará todo cuanto esté en su mano para ayudar al grupo, bien participando en el partido -si se repone a tiempo- o desde el banquillo como una aficionada infiltrada. "Tengo ilusión, lo que pasa es que estoy un poco tocada de la rodilla. De todos modos, estaré alentando a mis compañeras".
Cristina destacó que Sandoval ha desvelado que el adversario dispone de "buenas lanzadoras exteriores y sus extremos hacen daño". Por ello, apeló a un alto "nivel de concentración" para atajar los disparos. Además, añadió que "en Europa se nota mucho el nivel superior de las jugadoras y los lanzamientos son diferentes, puesto que el balonmano es otro más rápido y dinámico".
En cuanto al objetivo, como no podía ser de otra forma, la portera del Mar Alicante incidió en dar un paso al frente para que el escenario sea más ambicioso. "El reto es estar entre las cuatro mejores y una vez que eso se haya conseguido entonces habrá que pensar en superar al siguiente para llegar a la final. No puedes perdonar"
Una de las claves para no caer ante el Rostov pasa por obtener un resultado contundente en Alicante. Para Cristina Maestro ese margen de maniobra quedaría perfecto obteniendo "una renta de siete goles de diferencia. Allí nos espera un pabellón lleno y con mucha presión" Por este motivo, realizó un llamamiento a los aficionados. "Si el Pitiu Rochel presenta idéntico aspecto que el día que superamos a las danesas, seguro que habremos recorrido gran parte del camino".
fuente: http://www.diarioinformacion.com/deportes/2011/03/11/muro-frenar-rostov/1103590.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario